May 21, 2025

El dilema de los centros de datos

La transformación hacia una infraestructura digital sostenible como clave de competitividad.

Mientras México se posiciona como hub tecnológico latinoamericano, la expansión de centros de datos choca frontalmente con una infraestructura energética insuficiente. Este conflicto amenaza con frenar la revolución digital del país, pero también presenta una oportunidad única para redefinir el modelo energético del sector tecnológico mexicano.

Demanda exponencial frente a recursos limitados

México está experimentando un boom sin precedentes en inversiones para centros de datos. Según proyecciones de JLL, para 2025 el mercado mexicano de centros de datos podría alcanzar un valor de 1,700 millones de dólares, con un crecimiento anual promedio del 22%. Este fenómeno responde al aumento exponencial en la demanda de servicios digitales, la expansión del 5G y la creciente adopción de soluciones cloud por empresas mexicanas. El problema surge cuando analizamos esta expansión desde la perspectiva energética: un centro de datos de tamaño medio puede consumir tanta electricidad como una pequeña ciudad.

La realidad es que la infraestructura energética mexicana no está preparada para sostener este crecimiento. De acuerdo con datos de la Secretaría de Energía, el país enfrenta desafíos significativos en su matriz energética, con una dependencia de combustibles fósiles que supera el 75% y una red de distribución eléctrica vulnerable ante picos de demanda. En Connectia hemos observado cómo nuestros clientes del sector tecnológico manifiestan preocupación creciente sobre la disponibilidad y estabilidad energética para sus proyectos de expansión digital.

Cuando la tecnología avanza más rápido que su soporte

El verdadero dilema se materializa en la disparidad de velocidades: mientras la demanda de procesamiento de datos crece exponencialmente, impulsada por tecnologías como IoT, inteligencia artificial y realidad aumentada, la transición hacia un modelo energético sostenible avanza a un ritmo significativamente menor. Un informe reciente de Bloomberg NEF señala que los centros de datos en México podrían aumentar su consumo energético hasta un 65% para 2025, creando un escenario de tensión sobre recursos ya limitados.

Esta brecha no solo representa un problema operativo, sino también estratégico. Las empresas internacionales evalúan la disponibilidad de energía limpia y confiable como factor determinante para sus inversiones en infraestructura digital. Sin una estrategia clara de convergencia entre expansión tecnológica y sostenibilidad energética, México corre el riesgo de perder competitividad frente a otros mercados latinoamericanos como Colombia o Chile, que avanzan decididamente hacia matrices energéticas más limpias.

Estrategias aplicables para el sector tech

La buena noticia es que existen soluciones viables y probadas que las empresas tecnológicas pueden implementar, incluso sin esperar transformaciones estructurales del sistema energético nacional:

Los acuerdos de compra de energía (PPAs) representan una estrategia cada vez más popular. Estos contratos permiten a las empresas adquirir directamente energía renovable de productores independientes, asegurando precio y suministro a largo plazo. Empresas como Microsoft y Google han implementado estos modelos exitosamente en México, creando un precedente que empresas medianas pueden adaptar a su escala. Según datos de la Asociación Mexicana de Energía Eólica, los PPAs corporativos en México han crecido un 35% anualmente desde el año 2020.

La implementación de arquitecturas edge computing permite descentralizar las necesidades de procesamiento, distribuyendo la carga energética y reduciendo la dependencia de grandes centros de datos. 

Las tecnologías de eficiencia energética en centros de datos ofrecen retornos de inversión cada vez más atractivos. Desde sistemas avanzados de refrigeración hasta software de gestión energética inteligente, estas soluciones pueden reducir el consumo energético entre un 20% y 30%. Empresas como Schneider Electric reportan que la implementación de estas tecnologías en México ha duplicado su adopción en los últimos dos años.

Hacia un futuro de convergencia tecnológica y sostenibilidad

El desafío energético que enfrentan los centros de datos en México no es simplemente un obstáculo, sino una oportunidad para reimaginar la infraestructura digital del país. Las empresas que logren equilibrar ambición tecnológica con estrategias energéticas sostenibles no solo garantizarán su viabilidad operativa, sino que se posicionarán favorablemente en un mercado que valora cada vez más la responsabilidad ambiental.

Para 2025, los líderes del mercado mexicano de tecnología no serán necesariamente aquellos con mayor capacidad de inversión, sino quienes desarrollen modelos operativos inteligentes que integren eficiencia energética, fuentes renovables y arquitecturas tecnológicas flexibles. Desde Connectia continuaremos acompañando a nuestros clientes en este proceso, ofreciendo soluciones que permitan navegar exitosamente la compleja intersección entre revolución digital y transformación energética.